Regresando del viaje sideral.

Bitácora de vuelo 1529-A, después de haber visitado diferentes planetas de la galaxia robuts, se puede decir que el viaje fue calmo pero edificante.
Viendo como los seres que habitan esos planetas siguen con sus cursos estimados, erráticos pero estimados.
En el planeta del loco, el loco está solo y regresa a sus andadas bipolares, siguiendo clítoris femeninos imposibles de obtener y llegando a niveles exponenciales de masturbación.

Por otro lado la viuda ninfa, sigue con su fantasía de meterse el dedo todos los días y prejuiciar lo que es la vida, sabrosa prostituta de ella misma, de su hedonismo de dedo mojado, de meterse el dedo todos los días y de soñar con un príncipe azul que no llegará si no se decide a mamarle la verga al loco solitario.