corriendo desde adentro....

desde adentro del alma, aunque se que mi condición física está en proceso de recuperación, hoy decidí probar esprintar un poco mas fuerte en el recorrido habitual que hago a la pista de la secundaría de ocho vueltas en sentido descendente.

De la vuelta seis a la cuatro decidí apresurar el ritmo y luego de la tres a la uno en rachas subía y bajaba el ritmo.

Si considero que hace meses el recorrido era de treinta y pico de minutos y ahora fue de veintiocho, pues puedo decir que voy bajando tiempo, incrementando ritmo y por consiguiente ganando fuerza. Ahora bien si considero que hace un año el mismo recorrido lo hacía en menos de 24 minutos pues puedo decir que todavía falta incrementar el ritmo.

Solo son datos, que sirven para determinar hacia donde se va, no son el objetivo máximo.

Mi principal objetivo es correr y no dejar de hacerlo por un buen rato de aquí en adelante, no importando si me toma una hora o dos recorrer esas ocho vueltas.

Correr lento, correr rápido, correr simplemente es lo que me hace sentirme vital en todo sentido.
Me hace sentir vivo y productivo, me hace desear seguir andando en general.

Ahora los resultados no importan tanto, en cuestión de los minutos o de las distancias, lo que importa es la frecuencia semanal de carrera, como decía anteriormente, el espacio, el hacer es lo fundamental.

Cuando corro desde adentro de mi alma, salen a flote las malas sensaciones, los malos pensamientos, las pesadillas.

El correr saca lo mejor de mi y me proyecta a mundos mejores.

No solo es correr por trotar, por perder kilos o por mejorar la apariencia.

Hay un tono mas místico en esto, que deportivo o atlético, realmente ya lo que corra en relación a los tiempos me tiene sin cuidado o correr en carreras.

Es la búsqueda, el hablar dentro de mí, el desear ser mejor, el querer trascender lo que me agrada.

El reto, de levantarse después de una mala noche, de sobreponerse a la tristeza o al empanantamiento de la mediocridad.

Es tratar de ser mejor en todos los aspectos de la vida, de alejarse de la depresión.

Muchos años he corrido en mi vida y no los voy a tirar a la basura por otras cosas, mucho menos por cosas que no son lo mas sanas.

Hay que reforzar los buenos hábitos del pasado, hay que salir a ponerse los tenis y andar.

No importa si camino o corro, si corro lento, no importa nada.

Lo que importa es correr desde adentro, desde el alma.....