miércoles, 7 de septiembre de 2016

Opiniones extrañas...

Siempre la gente le da por opinar de lo que no le importa, cuando generalmente husmea otros asuntos para evitar los propios.
Esa idea de hurgar en la vida de los demás siempre evidencía la inseguridad que todo mundo tiene por reafirmarse ante el grupo social, el ser tomados en cuenta, o simplemente el no ser desechado o expulsado en el camino de la indeferencia.

Existen otras opiniones la cuales son cuando uno pregunta a otros su manera de pensar o de reaccionar ante un hecho que siendo propio pasa a ser del dominio público por uno mismo, por la estupidez e inseguridad que tiene uno de sí mismo.

Este  segundo caso es al que me voy a referir en este escrito, este caso es el peor de ambos casos porque uno da la pauta a abrirse en el momento en el que uno debería estar cerrado y es cuando uno es mas vulnerable.

Desde mi punto de vista uno no debería de andar preguntando nada a nadie, nadie tiene el dolor en la piel, por ejemplo un problema laboral, un problema personal, una situación cotidiana pueden ser resueltas con la propia experiencia en muchos casos o en todo caso se puede acudir con quién tenga una relación directa con el asunto y sea parte del problema. A veces uno va con la persona menos idónea para buscar esa ansiada respuesta, que solo desorienta mas.

Uno debe ser responsable de aceptar que la vida no es perfecta y que conlleva riesgos y consecuencias. Si uno determinó tomar el camino no hay mas de otra que andarlo, y recorrerlo solo, vaya no hay una muleta que te vaya a salvar de la odisea en la que te metiste.

La pérdida de tiempo y energía que conlleva la búsqueda evasiva de una solución a través de otros, no es mas que inseguridad personal.
Uno debe de verselas para resolver los problemas y buscar la solución que pueda ser la mejor posible dentro de todas las posibles.

Actuar una vez trazado el camino, será lo mas provechoso y necesario para resolver la adversidad.

No consultes, no indages, no pienses que la opinión de los demás tendrá una opinión fundamental, siempre a los ojos de otros imperturbables por ese dolor solo te restará energía.