miércoles, 24 de abril de 2019

Vámonos siendo prácticos y retomemos la rutina de trabajo.....

Así, es....
Me voy a apoltronar en mi silla de trabajo frente a mi escritorio (o lo que queda de él)...

Lo primero que pienso hacer en esta etapa en donde estoy por escriturar la venta de la casa y en donde todo partió de una idea y después de un programa específico de trabajo con metas y actividades las cuales se han venido cumpliendo de manera lenta pero gradual es fijarme ya una rutina global de trabajo.

He sido muy disperso en estos dos años por la incertidumbre.

Realmente la incertidumbre me ha quitado mucha energía y he hecho poco por controlarla.

La incertidumbre es el hecho de que si no se vendía la casa todo lo demás se paralizaba, y aunque estuve picando aquí y allá en varias cosas, no he sido lo suficientemente constante para realizar proyectos paralelos que me den vida.

El único proyecto paralelo fue el de acondicionar el departamento y arrendarlo. Fue una buena decisión tomada, pero siento que al enfocarme en buscar trabajo como empleado fue una mala decisión al no ser realista en base a las entrevistas efectuadas.

La incertidumbre que yo he creado ya debe terminar y debo ser muy consistente.
Ya no quiero lagunas llenas de agua entre caminos llanos.....

El paso de integrar mi religiosidad al asistir a misa me ha dado una estructura rutinaria que es buena, ya que implica ir a un lugar público, levantarme temprano, asearme y estar integrado en una comunidad, que aunque no interactúo si me da bases de inicio de un buen día. Mi Espíritu se retroalimenta.

Por otro lado el ejercicio realista y sostenido con una dieta a base de verduras me ha dado un mejoramiento en mi salud e imagen, eso me está dando seguridad y bienestar. Duermo además gracias a esta decisión.

Además el proceso de que la casa esté lista para venderse me agrada por haber sido lo previsor y ordenado al reunir la documentación legal de la casa, y su adecuación. La negociación de la comisión del vendedor también fue oportuna y realista.

Entonces la rutina debe partir ya de un horario específico debe abarcar de mañana a tarde.
Debe ser continua y prolongada.
Debe ser integral, abarcando los objetivos y metas del día.
Por integralidad de tareas entenderé las relacionadas a la productividad y a la búsqueda de ingresos.
Las actividades de mantenimiento como son ejercicio, espiritualidad, labores domésticas están relacionadas a otro grupo de actividades las cuales también deben tener su rutina y horarios.

Es necesario investigar, ser muy práctico en la obtención de metas y en su ideología.

No compliquemos el camino y vayamos paso a paso con constancia.

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