lunes, 9 de julio de 2012

Desapareciendo.

Llega el momento de desaparecer totalmente del entorno social creado.

Un entorno social artificioso en donde el aburrimiento hace presa de mi al no encontrar esa emoción de antaño por convivir con personas.

La vida de Carlos y su linda esposa, llena de problemas, de amarguras, por no tener posibilidades o por tenerlas y no llegar a culminarlas, por estar encerrados en esa conceptualización burguesa de no explorar, por esa visión amarga de pensar que todo está escrito. Me aburren sus costumbres, sus gustos, sus pláticas sobre sus hijos, como si estos hijos debieran seguir al pie de la letra los patrones que según Carlos deben ser. No Carlos a tus hijas se las fajan y se las van a coger esos dos que tanto detestas, esos dos van a estar contigo el resto de lo que te queda de vida y se irán alejando de ti porque cada vez que el tiempo que pasa eres controladoramente insoportable y sientes que la vida la tienes escrita. Eres un amargado que no tiene luz propia, estas oprimido por tus propias frustraciones y las comunicas a los demás. Eres un todo frustrado y aburrido, sinceramente no das para mas.

Y en general las otras mujeres con sus hijos absorventes, groseros. Tal parece que esas mujeres solo están para servir a sus hijos. Que no se dan cuenta que a mas servicio, mayor es el consentimiento que les provocan y mayor el mal?

De que sirve que sean guapas o bellas, de que sirve que puedan reescribir sus vidas al margen las vidas de sus hijos, si todo el día se esclavisan a los designios de esos mozalbetes egoístas y llenos de soberbia?

Que pesadas existencias tienen por vivir.

Desapareciendo de todo, del todo, de los medios de comunicación, de las redes sociales, de todo.

Sinceramente ya me ubique en lo que sigue por llegar, y lo que sigue por llegar ya llegó hace muchos años pero no lo había aceptado, no lo había declarado como real y es mas que la realidad.

Detesto este aburrimiento, este estar solo, pero veo que esta soledad es mas poderosa que cualquier alienación con la alineación de la sociedad, de los medios, de la rutina en sí.

Amo el mar, amo descubrir día a día cosas interesantes.

Es el momento de desaparecer para reencontrarme con lo que debió haber sido, con lo que será.

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