martes, 6 de octubre de 2015

fumando y tomando.

diría yo que cuando me conflictúo me da por tomar y por fumar.

no es una borrachera sólida y no soy un fumador.

Pero la imposibilidad de escapar de los pensamientos adictivos me provoca muy esporádicamente el fumar. Comprar una cajetilla de cigarros cada año es un ritual extraño, fumar casi un cigarro tras otro es parte de este extraño ritual.

Por lo general fumo después de un desayuno o comida fuertes, y fumo dos o tres cigarrillos uno tras otro.

El golpe lo voy encontrando por lo general al final del primer cigarro y lo perfecciono durante el segundo y el tercero.
Reconozco que es placentero el segundo cigarro y parte del tercero, la segunda parte del tercero ya empieza a asquearme.

La bebida es tranquila y menos contraproducente ya que habitualmente tomo los fines de semana, lo me emborracho, pero tomo a cualquier hora del día, puedo tomarme una copa de vino tinto antes de las diez de la mañana, a veces acompañando el cigarro, a veces puedo tomar whisky puro sin diluir en agua temprano.

El olor del vino o del whisky son agradables en la mañana.

La privacía de estar en casa solo con el sonido de la lavadora es el mejor momento para evadirse tranquilamente.

Esto es temporal y no lo hago casi nunca, muy ocasionalmente.

No es que no fume después o en otras ocasiones, pero el cigarro nunca ha sido algo pegado a mi vida.

No me vuelvo loco si no hay cigarros y pueden pasar años para que fume otra vez.

Probablemente me guste fumar ya de mas viejo, ya cuando no importe si me da un maldito edema.

La vida se extingue rápido como un cigarrillo prendido.

Es de llamar atención como de la misma marca el cigarro que venden en Estados Unidos es de un sabor mejor que el que venden aquí.

Probablemente nos dejan la porquería que envenene a mas personas y las mate mas rápido, o solo sea el control de calidad.

Me gusta como se ven las francesas jóvenes fumando y discutiendo por nada todo el santo día.

Me gusta como se ven los viejos fumando viendo pasar su vida con la mirada en un horizonte lejano mientras les sale humo por la boca y la nariz.

Me gusta como se veía el cowboy de Marlboro en la llanura de Wyoming.

La bebida francesa del vino y escosesa del whisky me producen pensamientos nostálgicos, de un mundo mejor de un mundo feliz.

Del placer.....

Muy probablemente por eso me evado con este método tradicional.

Al menos me siento un escritor importante con estas evasiones.

No hay comentarios: