Sandra....

 Reaparece nuevamente en mi vida, Sandra, la que fue alguna vez una buena amiga y una pésima amante, la que alguna vez me conmovieron sus lágrimas cuando le dije que no la quería, pero que como amigo podía disponer de mi.

Me llama, me busca, anhelante de ese consejo, que la calme, que le de esperanza.

Claro está que el mal de amores es cruel,
Mas cuando la crueldad viene de otro amante que probablemente se dio cuenta de que Sandra no tiene vida, que es una autómata sin decisión, sin autoestima, que asfixia, que aburre.

Pero bueno la vida es así.

Tampoco es de suponer que el amigo, sea alguien con clase, cuando me dí a la tarea de observarlo lo que vi fue un indio pata rajada, probablemente supo manipularle el amor propio, como lo hice yo en su momento. Pero bueno yo al menos se lo dije desde el principio, que yo no la amaba ni me interesaba tener una relación mas allá de ir al cine y de tener un sexo, que después se convirtió mas en cine que en sexo, porque definitivamente es pésima en la cama, ni hablar, que se le va hacer.

Me da gusto que me llame, no por ego, ni nada por el estilo, siento que es una persona que es buena, que vale la pena y que tiene un nivel cultural y valores que se adaptan para ser una buena amiga.

Vestigios del pasado que regresan, sin buscarlos, como si fuese una parte de energía que se creía perdida y que de pronto sin buscarlo regresa.

Como cuando encuentras esa cosa tan anhelada en el pasado y que creías perdida y que ahora sin esfuerzo te das cuenta de que siempre estuvo en ese cajón, bajo dos folders nuevos sin usar......

En fin.

No sufriré jamás por el mal de amores.....